¡Demasiada sal!

Entre el 27 y el 28 de octubre se llevará a cabo en la sede de la OPS en Washington una reunión de un grupo de personas expertas que trabaja desde 2009 para ver maneras de reducir el consumo de sal en las Américas.

Escribe Hubert Linders, representante de Consumers International en ese Grupo.

El Grupo, donde Consumers International participa desde su creación, evaluará los avances realizados en los pasados dos años y planificará los próximos pasos.

Los resultados de su labor son muchos y muy diversos, relacionados con la medición de la ingesta de sal, la abogacía y la divulgación de la información, los contactos con la industria para convocar a la reformulación de productos, los análisis económicos del problema y la revisión de publicaciones científicas que vinculan el alto consumo de sal con el aumento de la hipertensión y subsiguientes enfermedades crónicas.

Investigaciones

Para saber más sobre el conocimiento, la actitud y el comportamiento de los consumidores, organizaciones de cinco países (Argentina, Canadá, Chile, Costa Rica y Ecuador), llevaron a cabo una investigación muy interesante.  De nuestra región participaron la Unión de Usuarios y Consumidores de Argentina, la Tribuna Ecuatoriana del Consumidor, Conadecus de Chile y Bandera Ecológica de Costa Rica, mientras CI articuló la encuesta.

Los resultados muestran que a sólo uno de cada tres consumidores les importa su ingesta de sal y su vínculo con la salud.

Dos tercios de los consumidores no lee las etiquetas de los alimentos que compran, mientras muchos (más del 90%) desconocen la diferencia entre sodio (lo que está mencionado en las etiquetas) y la sal.

Por lo tanto, la conclusión más importante debe ser que falta mucha educación de los consumidores y los profesionales de salud (doctores, nutricionistas, y otros) para apoyar este proceso.

Redes nacionales

Siguiendo el ejemplo de WASH (World Action on Salt and Health), una organización que realiza campañas internacionales para reducir el consumo de sal, el Grupo está promoviendo y apoyando la creación de redes nacionales de organizaciones de profesionales de la salud, consumidores y otras organizaciones interesadas en América Latina y el Caribe.

Ya se lanzó Acción Latinoamericana de Sal o Salud (ALASS) en Chile, mientras Perú y Brasil mostraron interés en hacer lo mismo. Paralelamente se están haciendo los trámites para crear ALASS Bolivia a finales de este año.

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