Más niños jugando en las calles.
Más ferias de intercambio como un
ejercicio de consumo colaborativo.
Menos niñas y niños obesos o con sobrepeso, y
fin a la publicidad en las escuelas, son los deseos para este
año del Proyecto Infancia y Consumo del Instituto Alana, de Brasil, y que publicamos a continuación.
Este artículo llama a la movilización, sensibilización y articulación de los diferentes actores de ese país para promover la defensa de los derechos de niñas y niños frente al consumismo infantil y la publicidad abusiva dirigida a este segmento vulnerable y receptivo.
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Tenemos una visión esperanzadora de este
nuevo año, y pensamos que un ciclo
termina y otro comienza marcando un movimiento colectivo y ritual de transformación.
Esto requiere un ojo más sensible y en retrospectiva de los eventos del año pasado para repensar lo que pasó, planificar y esperar que algunas cosas cambien para mejor durante este año que comienza. Este artículo llama a la movilización, sensibilización y articulación de los diferentes actores de ese país para promover la defensa de los derechos de niñas y niños frente al consumismo infantil y la publicidad abusiva dirigida a este segmento vulnerable y receptivo.
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El año 2015 es de grandes conmemoraciones: el Estatuto del Niño y del Adolescente (ECA) y el Código de Protección al Consumidor (CDC), -dos importantes disposiciones legales en la defensa de los niños y los consumidores – que completan 25 años de existencia marcando avances legales en la protección de los niños frente a las convocatorias de mercado.
Y más allá de estas fechas para guardar en la agenda, también tendremos eventos, igualmente importantes, como las Conferencias de Seguridad Alimentaria y Nutricional y los Derechos de la Niñez y Adolescencia para debatir problemas serios y urgentes relacionados con la salud y el desarrollo de aquellos que merecen nuestra protección especial. Es decir, año nuevo, fuerza nueva!
Nuestros deseos son de un año donde el foco en la defensa de los derechos de nuestros niños sea eficaz y compartido por todos: la familia, la sociedad, el mercado y el Estado.
Queremos ver a los diversos actores de nuestro país involucrados en la transformación de las vivencias infantiles en una infancia más plena y libre apelaciones comerciales.
La Resolución 163
El año que pasó fue, por un lado, simbólico y victorioso para la defensa de los derechos de los niños en Brasil debido al logro histórico del día 4 de abril 2014, fecha de publicación de la Resolución 163 del Consejo Nacional de los Derechos del Niño y Adolescentes (Conanda), que aclara lo que es la publicidad abusiva dirigida a los niños, dando ejemplos de las normas que deben aplicarse a casos concretos.
Pero, por desgracia, lo que observamos en la práctica durante el año pasado fue la continuación inmoral e ilegal de la publicidad dirigida a un público indefenso por la fase peculiar de desarrollo en que se encuentra.
Por eso, esperamos que durante este año 2015, la Resolución sea aplicada por el mercado y por el Estado y que la sociedad civil haga su parte, denunciando las prácticas abusivas para que un nuevo paradigma en la realización de los derechos del niño sea alcanzado de hecho y debidamente celebrado por todos nosotros.
Los derechos de nuestros niños no pueden seguir siendo dejados de lado debido a intereses puramente económicos. Es necesario protegerlos, asegurándoles la verdadera libertad de elección de productos y servicios y también el acceso a una producción cultural de calidad, respetando los valores éticos y sociales de los niños y sus familias.
Esperamos que en el 2015 la educación para el consumo consciente y el tema del consumismo infantil entren realmente en el calendario escolar y en las prácticas docentes valorizando la importancia del tema elegido para la redacción del Examen Nacional de Bachillerato a finales de 2014, que fue la publicidad dirigida a niños y niñas. Esperamos que las escuelas sean cada vez más espacios de formación para la ciudadanía y no para un consumo irreflexivo.
Fin a las marcas invadiendo escuelas
En este contexto, uno de nuestros mayores retos es reducir la invasión del espacio escolar por marcas que hacen publicidad para nuestros hijos, como ha ocurrido con frecuencia, y es analizado por la ONU y por el MEC en 2014.
Pero nuestros deseos van más allá y vislumbran el inicio de la reversión de las tasas de sobrepeso y obesidad infantil que ahora afecta al 30% y 15% de la población infantil de Brasil, respectivamente, según los últimos datos de la Encuesta de Presupuestos Familiares (POF 2008-2009).
Y en este tema, no podemos olvidar que en el pasado año, las empresas de alimentos asumieron ser parte del problema y propusieron nuevas medidas más estrictas de autorregulación, que vamos a acompañar y queremos ver que ocurra, paralelamente al cumplimiento de las normas legales, por supuesto.
Ahora, sin duda, todo esto sólo se alcanzará con la reflexión continua de las familias acerca del problema grave y urgente del consumismo infantil y en cómo pueden ayudar a cambiar esta situación ofreciendo alternativas al consumo.
La promoción de una cultura de la familia basada en los valores humanos y menos materialista es esencial para promover entre los niños más experiencias de consumo colaborativo, como la organización y participación en ferias de intercambio (donde no sólo los niños, sino los padres y madres tienen la oportunidad de ejercer el desapego y entender que intercambiar y donar puede ser más divertido que comprar).
Reocupar los espacios públicos
Otro consejo importante es la necesidad de reocupar los espacios públicos -que han sido invadidos por las actividades de mercado supuestamente “recreativas"-, para los niños, donde puedan ejercer su ciudadanía, además de experimentar y aprender con las delicias de la ciudad, como el encuentro con la diversidad.
Renovamos nuestras esperanzas invitando no sólo a la reflexión, sino a la acción. ¿Qué tal si empezamos el año pensando en los derechos de nuestros hijos? Prioridad absoluta en nuestro país, ellos necesitan ser escuchados en sus derechos desde sus primeros días de vida, y lo principal es tener una infancia plena.
Por lo tanto, la movilización, la sensibilización y la articulación de los diferentes actores para promover la defensa de los derechos de nuestros niños frente al consumismo infantil son urgentes.
La acción conjunta en los frentes de la educación y la regulación requiere ganar fuerza y por eso la importancia de que ustedes se unan a nosotros en este movimiento para llevar el tema hacia delante y presionar a los organismos competentes para hacer valer los derechos de nuestros hijos. Sabemos que un año en la vida de ellos puede marcar toda su existencia.
Artículo publicado el 23 de enero de 2015. Original portugués.
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